Lista de miedos, maldiciones y errores imberbes
Siempre he sido y siempre seré un poco cobarde.
¡Hoy si que llego a tiempo!
Dejo por aquí una relación de cosas que me dan miedo:
La Ouija
Un medio de comunicación con el Más Allá muy obsoleto. Era más rápido escribir un SMS en un Nokia 3310. Sale más rentable reunirte con ellos después de una muerte natural.
Lo que me da miedo de la Ouija es su capacidad de asustar incluso estando mal dibujada en un papel arrugado. De eso que quedas con tus amigos preadolescentes, en el sótano del Adri, [ambientado de forma que también sirva para echar una partida de D&D* después de hacer satanismo] y saca una servilleta con un abecedario sin la H [que más da, si es muda] y muchos pentagramas invertidos.
Nunca he participado en ninguna hasta el final porque me daba miedo. Soy un mal ateo, porque puedo afirmar que Dios y los demonios no existen. Sin el más mínimo reparo.
Pero el ser humano tiene la capacidad de dudar, y como humano pienso: Si Dios existe, ¿qué va a hacer? ¿Apuntarme un pecado como si fuera un negativo en el cole? Puedo con ello. Pero si en medio de una Ouija aparece Satanás himself, como mínimo una maldición cae, y ahí no soy tan gallito.
Las maldiciones
¿Recordáis los correos cadena? Me daban miedo especialmente los que te maldecían si no lo reenviabas a X contactos. Existían diferentes grados de maldición; desde tener muchos años de mala suerte hasta el fantasma de una niña que aparecía para matarte.
Además, te contaban la terrorífica historia de la muerte de la niña. Era horrible, pero lo peor es que, después de todo eso, y de que esa niña se haya reencarnado en demonio, su forma maléfica es un correo de spam.
Norton Antivirus habría ganado millones si en la caja hubieran puesto: ¡AHORA, CON EXORCISTA INCLUIDO!
Algo similar pasa con Samara, la niña de The Ring, que estaba encerrada en un VHS. Ha sido la más afectada por el auge del streaming después de los videoclubs. **
Estos correos también servían para saber cuál de mis amigos era el más cobarde y confirmar que siempre era yo.
Los profesores y profesoras de Historia
A lo largo de mi vida me las he visto canutas para aprobar esa asignatura. En secundaria tuve una profesora que parecía sacada de la Sección Femenina de la Falange y que daba las clases como si aún estuviera ahí.
El único recuerdo que guardo era el momento en el que se oían por el pasillo el ruido de sus tacones y el tintineo de las llaves. Mi miedo era que uno de esos días viniera a llevarme al paredón por rojo.
En segundo de bachillerato, fui a septiembre con cuatro asignaturas. No pensaba ni presentarme, pero terminé aprobando tres. Solo suspendí Historia.
Cuando asimilé repetir un curso con cuatro, no estaba mal. Sobre todo, porque me había autoengañado diciendo que era para “subir media”, pero con una estaba seguro de que me iba a esperar un año de agonía constante.
Milagrosamente, el 3 que saqué se transformó en un 5. Venía acompañado de una recomendación del profesor:
“Hagas lo que hagas. No te dediques a la Historia.”
Hice Selectividad [la actual EBAU] sin haber estudiado apenas, y escogí presentarme a Historia. Porque a idiota no me gana nadie. [Al menos no en la Historia que estudié y eso que aparecía un tal Fernando VII]
Un nuevo milagro más. Aprobé la selectividad. No gracias a un nuevo suspenso en Historia.
El joven Pepe fracasó en su intento de estudiar Bellas Artes porque no le daba la media. El destino le estaba diciendo que ese 5’47 sólo le daba acceso a Historia…
…del arte.
El joven Pepe nunca pensó en el viejo Pepe, que soy yo, el que está escribiendo esta newsletter que ahora tienes en tu pantalla. El viejo Pepe, que ahora es padre y, además, ha vivido todo lo que el joven Pepe iba a vivir a partir de entonces, no haría esa estupidez de decirle que estudiara otra cosa.
Porque el viejo Pepe, ósea, yo, no aprende. Porque el viejo Pepe, ósea, mi menda, ha empezado hace un mes a prepararse las oposiciones para profesor de Secundaria. Especialidad:
Geografía e Historia.
En cualquier caso le diría al joven Pepe que se olvidara de hacer un doctorado, porque es pobre y además no es tan listo como se cree, y que si empieza con las oposiciones en cuanto acabe con la carrera yo ya sería profesor de Secundaria y no estaría pasando por esto ahora.
No se si fue el día en el que dejé una Ouija a medias, corté una cadena de emails [lo dudo, porque los reenviaba TODOS] o la frase de mi profesor de bachillerato. Pero por algún lado, me ha caído una maldición; voy a tener que ser profesor de Historia y estoy acojonado.
ANÉCDOTAS SEMANALES
Me he afeitado. Como puedes leer, mi vida es una mala decisión tras otra.
Llevaba sin afeitarme desde marzo de 2020. En plena cuarentena, donde nadie pudiera verme. Previo a eso, no me había afeitado desde los dieciséis años.
Raúl llevaba un tiempo diciendo que quería verme sin barba y ya lo había pospuesto demasiado. Así que lo hice, incluso le dejé que me afeitara un trozo para evitar lo que sabía que iba a pasar.
En cuanto salí del baño, corrió a esconderse a la otra punta del salón y estuvo casi dos días sin querer acercarse a mí. De repente, su padre tenía la cara de un extraño. Apenas me reconocía yo mismo, imagina él.
Y si entramos en los detalles estéticos, ni te digo. Hacía años que no me veía el cuello, pero he cogido tanto peso últimamente que ahora tampoco hay una línea que lo divida de mi cara. Parezco un Slitheen de Doctor Who [Adjunto foto]
No culpo a Raúl, yo también huiría. Y como si fuera la mezcla entre un vampiro y Dorian Grey, no me miro al espejo por si me muero de un infarto.
(NO) RECOMENDACIONES
Se que esta es la sección favorita de todo el mundo [sobre todo tuya, querido lector/a/e, que llegas hasta aquí]. Pero esta semana no he visto ni leído nada reseñable. [Está todo en proceso] Eso si, estoy viendo mucho anime. En cuanto acabe el primero hago análisis completo. Creo que para la semana que viene.
VIÑETA DE LA SEMANA
DESPEDIDA EMOTIVA
Es difícil escribir, es difícil ser constante y tratar de cultivar el hábito. Hay semanas en las que cuesta sacar algo “publicable”, incluso entre eso hay muchas cosas que, revisadas, las habría hecho de otra forma.
Pero como siempre, agradezco que hayas llegado hasta aquí. Hasta el final, sólo para ver el GIF de Terminator, que es lo que realmente representa el espíritu de lo que escribo:
Podremos estar hundiéndonos en lava [fuego líquido o lo que mierda sea eso que es letal para un Terminator] que alzaremos la mano y diremos que todo está OK.
Sayonara babys.
*Hay asociaciones religiosas que no distinguen entre la Ouija y D&D por eso quisieron prohibirlos en su momento, sabían que traerían cosas malas en el futuro y al parecer tenían razón. Por culpa de estas prácticas existe la cuarta temporada de Stranger Things.
**Fuentes informan de que ha formado una plataforma para la recuperación del vídeo analógico (PRVA) en colaboración con Blockbuster. Su primer movimiento fue producir la serie homónima, Blockbuster, en Netflix, pero fracasó, la gente moría de aburrimiento antes de que se cumpliera la maldición.